Los organizadores de los Juegos Olímpicos del 2016 están ofreciendo que la ciudad sede, Río de Janeiro, sea una potencial "isla de energía" inmune a apagones como el que el martes dejó a oscuras a 60 millones de brasileños.
Sin embargo, algunos expertos cuestionaban el jueves si sería posible mantener un refugio de energía seguro para los Juegos Olímpicos.
Río tiene la capacidad de producir más energía eléctrica que la que puede consumir, al contar con plantas termoeléctricas alimentadas con gas natural y reactores nucleares en las cercanías.
El Comité Olímpico del Brasil destacó ese hecho en su propuesta de candidatura para ser sede de los juegos, al señalar que la energía producida localmente podría alimentar únicamente a la ciudad en vez de ser distribuida a través de la red nacional.
Además, las sedes olímpicas también tendrían el respaldo de energía generada por proyectos eólicos y solares.
Sin embargo, desde el apagón del martes, que dejó en tinieblas a gran parte de Río de Janeiro y a amplios sectores del Brasil, el comité se ha negado a comentar sobre el apagón o sobre el concepto de la isla de energía.
En vez de ello, los integrantes del comité organizador enviaron por correo electrónico a los periodistas la sección de la propuesta de sede que habla sobre energía, en la cual no se da información detallada sobre lo que se necesitaría para aislar a Río con el fin de que opere con la electricidad generada localmente. El Ministerio de Energía del Brasil también se negó a hacer comentarios al respecto el jueves.
Algunos expertos indicaron que la idea de retirar a Río de la red nacional para que pueda por sí misma utilizar su energía es una idea posible, pero cuestionaron por qué los funcionarios del comité organizador no ofrecieron detalles sobre los planes de inversiones en infraestructura que se necesitarán para llevar a cabo la propuesta.
El informe olímpico califica al sistema eléctrico de Brasil como "muy exitoso y estructurado". Sin embargo, las señales de alarma sonaron luego que una serie de tormentas provocaron cortos circuitos en los transformadores de una línea clave de transmisión procedente de la presa de Itaipu, la cual genera el 20% de la electricidad del Brasil, indicó Johanna Mendelson Forman, una experta en energía del Centro del Estudios Estratégicos e Internacionales con sede en Washington.
"El producir energía y distribuirla por la red son dos problemas diferentes. Es igual en Estados Unidos, hay muchos lugares donde se produce mucha energía, pero el reto es introducirla a una red anticuada", agregó.
El plan de la candidatura olímpica asevera que "incluso ante la ausencia de un sistema de interconexión, sería posible operar la red de energía de Río de Janeiro como una isla de energía", lo que significaría que no dependería de la electricidad producida por la presa de Itaipu, que fue la que presentó la falla durante el apagón.
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